Seguritecnia 452

SEGURITECNIA Abril 2018 37 aprovechar el acceso de un vehículo autorizado a través de un sistema de barrera activa y manipular las barre- ras de los vehículos para luego pro- porcionar acceso ilegal. Impacto penetrativo (embestir perso- nas y estructuras). Entrada por engaño para acceder a áreas restringidas (vehículo troyano). Coacción (contra un vigilante de se- guridad o empleado para abrir una barrera). Mitigación de vehículos hostiles Llegados a este punto, cabe definir qué es un lugar de pública concurren- cia. En concreto, son lugares o entor- nos fácilmente accesibles para un gran número de personas de forma prede- cible. Los lugares concurridos incluyen, pero no se limitan, a estadios deporti- vos, centros de transporte, centros co- merciales, hoteles, clubes, lugares de culto, atracciones turísticas, cines y es- pacios cívicos. No tienen que ser ne- cesariamente edificios y pueden incluir espacios abiertos como bulevares, par- ques y centros comerciales peatona- les. Además, no tiene que estar lleno en todo momento: las densidades de la multitud pueden variar entre el día y la noche o la época del año, y pue- den ser temporales, como en el caso de eventos deportivos, festivales al aire libre o eventos puntuales. Es por ello que la seguridad debe ser proporcional a la amenaza. Las medidas de seguridad pueden ser in- tensivas en recursos, costosas y, si no se gestionan y comunican correcta- mente, pueden alejar al personal y al público (crear efecto negativo y me- diático) e interrumpir significativa- que también se puede utilizar el pro- pio vehículo, el cual se desplaza a gran velocidad y que puede presentar el peligro principal. Los objetivos más probables de los vehículos hostiles son los espacios ocupados por una masa crítica de per- sonas (objetivos blandos) en un mo- mento determinado, donde la finali- dad es causar la muerte o lesiones de gravedad a un gran número de perso- nas en el menor tiempo posible. Por ello, el conductor de un vehí- culo hostil puede no necesariamente obedecer las reglas de tráfico. Existe un peligro inherente al no tener esto en cuenta al realizar una evaluación del sitio. Con demasiada frecuencia, las medidas de seguridad se han insta- lado bajo la suposición de que un ve- hículo, por ejemplo, no circulará por el camino equivocado por una calle de sentido único. En este sentido, este documento se enfoca en prevenir el acceso vehicu- lar a lugares concurridos para ayudar a mitigar el riesgo de un ataque terro- rista. Las contramedidas sugeridas que se expondrán posteriormente en la se- gunda parte del artículo también pue- den ser valiosas en otras situaciones, como la protección de peatones de conductores peligrosos o ebrios. En definitiva, los métodos de ataque de vehículos hostiles pueden incluir: Vehículo estacionado (conteniendo o derramando material para causar daño, es decir, explosivos o amenazas NRBQ –ataques con armamento nu- clear, radiológico, biológico y quí- mico– ). Invasión: abrir brechas en las defen- sas o accesos del sitio (sin impacto), Contexto de la amenaza El uso de un vehículo como arma en un ataque terrorista no es nuevo. Du- rante algún tiempo, esta táctica ha sido considerada y utilizada por los ex- tremistas violentos, especialmente en Iraq, Siria y Afganistán, y más recien- temente en los países occidentales. Los últimos incidentes terroristas de corte yihadista y la propaganda extre- mista violenta demuestran que los ata- ques de vehículos hostiles continúan siendo de interés para los extremis- tas violentos en todo el mundo por su bajo coste de preparación y ejecución. Los ataques de esta naturaleza requie- ren una capacidad mínima, pero pue- den tener un impacto devastador si se dirigen a lugares concurridos. El ataque terrorista el Día Nacional de Francia en Niza en julio de 2016 y los subsiguientes atentados con vehí- culos en Alemania, Austria, Suecia y el Reino Unido, así como el reciente en Barcelona y Cambrils (Tarragona), el pasado mes de agosto, han atraído la atención mundial (ver cuadro “Ataques por embestida con vehículo”). La pro- paganda terrorista ha glorificado es- tos ataques, incluidos los métodos y las tácticas utilizadas, demandando al resto de seguidores la emulación en todo el mundo. Sin embargo, el potencial de los ata- ques de vehículos hostiles no se limita a los extremistas yihadistas: cualquier grupo o individuo propenso a la vio- lencia podría usar un vehículo como arma si se adapta a sus objetivos. Vehículos hostiles Generalmente, un vehículo hostil es aquel cuyo conductor está determi- nado a acceder a un área o ubicación restringida o no autorizada con el fin de causar lesiones o la muerte a per- sonas, interrumpir negocios o efec- tuar publicidad por una causa; en sín- tesis, se trata de “sembrar el terror”. Se puede usar un vehículo hostil para transportar un artefacto explosivo im- provisado (VBIED, del inglés Vehicle- Borne Improvised Explosive Device ), aun- Cualquier grupo o individuo propenso a la violencia podría usar un vehículo como arma si se adapta a sus objetivos Seguridad Corporativa