Seguritecnia 332

SEGURITECNIA 78 Julio - Agosto 2007 OPINIÓN cío legislativo, una imposibilidad notable de formarse en el tema y, consecuentemente, una casi total falta de sen- sibilización de todos los eslabones integrantes de la ca- dena de la Seguridad Contra Incendios: autoridades, pres- criptores, empresarios, proyectistas, instaladores y usua- rios de la Seguridad. Estaba todo por hacer y el tema, creí entonces y creo ahora, que valía la pena abordarlo en to- das sus facetas. Pero, ¿qué hacer, por dónde empezar si las lagunas eran de una dimensión que sobrepasaban, con mucho, los medios con los que íbamos a contar para tratar de rellenarlas? nuales de incendios hasta la traducción o produc- ción conjunta de especificaciones técnicas para sis- temas fijos o protección de diversos tipos de riesgos. En este tema también contamos con la colaboración de un grupo de buenos profesionales que se volcaron en nuestra ayuda y supieron ver que de la mayor pro- fesionalización del sector solo se podrían producir buenas consecuencias para todos. ➠ La creación de una escuela de formación en la que todos aquellos técnicos que quisieran pudieran for- marse y, con ello, cubrir las carencias en estas mate- rias del sistema educativo español, a todos los nive- les. Es este tema, el que mayores alegrías nos ha pro- porcionado ya que, partiendo del desconocimiento del grado de necesidad existente, nos hemos encon- trado con la grata sorpresa de que cerca de 40.000 técnicos han confiado en Cepreven. Para mí, siempre será un orgullo el poder presentar este balance de la escuela de formación y estaré, también siempre, agra- decido al centenar de profesores-colaboradores con que hemos contado para poder presentar estos resul- tados. La creación y presidencia durante 13 años de la Comisión de Formación de la Confederación Europea de Asociaciones de Protección Contra Incendios, en la que trabajan expertos en formación de 16 países es otro hito que me produce una especial satisfacción. Campañas de divulgación Creo que vale la pena destacar también los esfuerzos y campañas de divulgación realizadas en esta etapa en re- lación con diversos riesgos, campañas que esperamos ha- yan contribuido a fomentar la necesaria cultura en pre- vención y protección. Incremento de cultura que, como en tantos otros temas, se ha de conseguir en base a mu- cha reiteración en los mensajes a trasmitir a la sociedad, ya que sólo a base de constancia e inversión en preven- ción llegaremos a ser, algún día, integrantes de una socie- dad bien informada con la que será mucho mas fácil tra- bajar en seguridad. Parece detectarse, especialmente en las disposiciones reglamentarias, una especie de objetivo de “ser cultos por decreto”. Bien están las intenciones de perfeccionar el nivel cultural en materia de prevención desde los ámbitos públicos pero, necesariamente, esta ac- ción se ha de complementar con las correspondientes me- joras e inversiones de todos los agentes vinculados a la Se- guridad. Sin duda, durante esta larga etapa que estoy comen- tando se han realizado avances legislativos importantes, en alguno de los cuales hemos contribuido cumpliendo con el mandato estatutario de Cepreven, en el que figura “Al comenzar a trabajar encontré un gran vacío legislativo y una casi total falta de sensibilización de todos los eslabones integrantes de la cadena de la Seguridad Contra Incendios ” Algo de imaginación, mucho trabajo y algunas do- sis de pasión por la obra a acometer realizaron y reali- zan el milagro de hacer que la asociación subsista dig- namente y contribuya continuamente a cumplir con sus principales objetivos. Una gran ventaja que tuvimos para ir avanzando fue la posibilidad de empezar a trabajar pronto en comisio- nes internacionales de las que absorbí todo lo que pude y en las que conté con grandes maestros. Con esta pre- misa fue relativamente sencillo establecer un plan de acción en materia de Seguridad Contra Incendios que conllevaba: ➠ La captación de empresas interesadas en el pro- yecto y que estuvieran dispuestas a contribuir, aun- que fuera en forma modesta, a la consolidación del mismo. Pronto y sobre la base de la respuesta de las entidades aseguradoras, se unieron a la asocia- ción unas decenas de empresas que, al día de hoy son cerca de dos centenares, a las que Cepreven debe, en buena parte, su éxito. ➠ La elaboración de especificaciones técnicas que sir- vieran de base para la redacción de proyectos y el control de las instalaciones. Tuvimos que realizar, desde la primera regla para establecer los requisi- tos adecuados a exigir a los populares extintores ma-