Seguritecnia 341

38 SEGURITECNIA Mayo 2008 II Jornadas de Seguridad en Entidades Financieras 1. La evolución de la tecnología no sólo juega a favor de un mejor servicio a nuestros clientes sino que también, si no estamos preparados para ello, puede jugar en contra de los intereses de las entidades y servir para aumentar el nú- mero de fraudes y delitos. El phising , la clonación de tarje- tas, el ataque para penetrar en la red informática y la aper- tura de cuentas con documentación e identidad falsifica- das son ya un verdadero problema para los departamentos de Seguridad de la entidades financieras. A todo esto hay que sumar la llegada a España de bandas altamente espe- cializadas en perpetrar hechos delicticos contra nuestras entidades y nuestros clientes, empleando métodos alta- mente peligrosos como explosionar cajeros automáticos, y que, a la vez, operan de una forma sumamente orga- nizada, empleando dispositivos altamente sofisticados. Nuestro principal reto es disponer de medios suficien- tes para luchar contra este tipo de delincuencia que nos afecta directamente y, no menos importante, el concien- ciar debidamente a todos los empleados sobre la suma im- portancia que tiene aplicar de forma estricta toda la nor- mativa y medidas de seguridad a su alcance. 2. Afortunadamente en nuestro caso concreto, sí que en- contramos esa respuesta por parte de nuestros proveedo- res. Y esto ha sido debido a que siempre nos hemos incli- nado por trabajar con empresas que han apostado decidida- mente por la investigación y el desarrollo de sus productos y que, además, han colaborado directamente con nosotros en la creación, diseño y evolución de sus productos, ade- cuándolos a nuestras verdaderas necesidades. Esta filosofía de trabajo nos ha permitido evitar en algunos casos, y solu- cionar en otros, graves problemas de seguridad. Por nuestra parte, estamos especialmente orgullosos de haber colaborado en la creación de equipos de seguridad especialmente diseñados para la banca y que, incluso, han sido objeto de galardones y reconocimientos profesionales por su innovación y calidad. 3. La verdad es que en los últimos años se viene detec- tando una sustancial mejora en las relaciones de colabo- ración entre los Cuerpos de Seguridad y los directores de Seguridad de las entidades financieras. Ambas partes so- mos conscientes de que ese entendimiento y colaboración son necesarios para una eficaz lucha contra la delincuen- cia en beneficio de todos los ciudadanos, pero las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad deben hacer un esfuerzo real por integrar funcionalmente la seguridad privada en el bien general que es la seguridad de la sociedad, ya que si bien corresponde al Estado, los servicios privados de seguridad, como complementarios y subordinados a la seguridad pú- blica, deben tener el suficiente respaldo, respeto y ayuda por parte del Estado en pro del beneficio común de la ciu- dadanía. No obstante, debemos de seguir esforzándonos en me- jorar esa colaboración; el intercambio mutuo de infor- mación debe ser una realidad en nuestro quehacer diario. Pero insisto en que debe ser mutuo. Es necesario hacer, de una forma eficaz, reuniones periódicas de trabajo para po- ner en común incidencias, nuevos delitos detectados, me- didas de control, soluciones, etc. 4. Este es un tema que merece una gran reflexión por parte del sector y del Estado, porque debemos ser cons- cientes de que la Ley y el Reglamento de Seguridad Pri- vada están obsoletos. Han prestado un gran servicio, pero ha llegado el momento de que se lleve a cabo una verda- dera revisión del articulado que incremente las competen- cias de la seguridad bancaria. Por ejemplo, sería mucho más eficaz para todos que con sólo una certificación del direc- tor de Seguridad presentada en la Delegación del Gobierno, en la cual constase que todos los elementos necesarios es- tán instalados en una oficina y han sido debidamente com- probados, bastase para ser aperturada, independientemente de que con posterioridad la Policía pudiese inspeccionar de oficio, si se estimase oportuno. Nos evitaríamos costes y tiempo, tanto nosotros como la Policía. Pero independientemente de lo anteriormente ex- puesto, creo que no sería osado decir que consideramos necesario que los departamentos de Seguridad banca- rios, con personal habilitado, se pudiesen ocupar direc- “En los últimos años se viene detectando una sustancial mejora en colaboración entre los Cuerpos de Seguridad y los directores de Seguridad de las entidades financieras” Bernardo Parra Asíns Director de Seguridad de Ruralcaja