Seguritecnia 367

72 SEGURITECNIA Septiembre 2010 Artículo Técnico afecta al nivel de usuario que puede lle- varla a cabo. Independientemente del rearme lo- cal, esta operación puede efectuarse de forma remota (bidireccional) si se cuenta con la correspondiente autoriza- ción para ello. ▪ Una alarma de intrusión o atraco puede ser rearmada para todos los grados con un código con niveles 2 ó 3. ▪ Una alarma de tamper o un fallo (no de alimentación ni ATS) puede rear- marse con códigos de nivel 2 ó 3 para grados 1 y 2, y únicamente con nivel 3 para grados 3 y 4. ▪ Un fallo de alimentación o ATS puede rearmarse con código de nivel 2 para todos los grados. Inhibición y aislamiento de elementos Ya comentamos en una anterior entrega que se produce aquí un importante cambio en estos con- ceptos. Ahora, inhibir un elemento (de- tector, ATE, tamper , etc.) es lo que antes entendíamos por “anular”, y se refiere a su supresión temporal hasta el siguiente cambio de es- tado en el que entra de nuevo en servicio de forma automática. Aislar un elemento es dejarlo fuera de servicio por tiempo inde- finido. Antes los llamábamos “inhi- bir”, por lo que habremos de tener cuidado al referirnos a ello. Para todos los grados, la inhibi- ción es posible mediante los nive- les 2 y 3. El aislamiento de elementos exi- ge niveles 2 ó 3 para los grados 1 y 2, pero sólo el nivel 3 puede ha- cerlo para los grados 3 y 4. S transcurso del procedimiento de des- activación (tiempo de entrada), ésta debe señalizarse localmente o noti- ficarse mediante un WD. Si el sistema dispone de ATE, la alarma no ha de ser transmitida hasta que, al menos, hayan transcurrido 30 segundos de señaliza- ción local, y siempre y cuando el tiempo de entrada haya finalizado. Significa esto que, si se activa un detector no pertene- ciente a la ruta de entrada del sistema in- mediatamente tras el acceso, habrá que emplear este retardo en la transmisión de la incidencia a la CRA. Reactivación o rearme tras una alarma Esta función se aplica tras una alarma de intrusión, atraco, tamper o fallo, y Derogación del impedimento de armado A esta función la conocemos de toda la vida como “ armado forzado ”. Con ella es posible obviar el problema y proce- der al armado del sistema o de la parti- ción afectada. Para un sistema de grado 2, con un código de nivel 2 (usuario) es posible derogar cualquiera de las condiciones de activación o fallo vistas en el apar- tado anterior y proceder al armado. Para un sistema de grado 3, bastará con un código de nivel 2 en algunos casos, pero será necesario un código de nivel 3 para superar un tamper , un fallo de enlace y un fallo del ATS y/o del WD. En el caso del grado 3, y ante la im- posibilidad de contar en estas circuns- tancias con un técnico en el momento del armado, es posible recurrir a la CRA para que intervenga bidireccional - mente y subsane el problema. Sistema o partición activada (o armada) Una vez efectuado el armado, una se- ñal indicará durante un tiempo limitado la nueva situación. Para los grados 1 y 2 se exige una indicación del estado ar- mado/desarmado, pero no es obligatorio para los grados 3 y 4. Desactivación o desarmado Resaltamos aquí el tiempo de entrada máximo permi t ido para todos los grados, estable- cido en 45 segundos y señali- zado localmente (notificado). Esta medida es acer tada, ya que impide situar el ACE (te- clado) demasiado alejado del acceso. Al limitarse el tiempo, se limitan también las posibili- dades del intruso para sabotear el sistema desde el interior, evi- tando así su reacción. Sin embargo, existe un as- pecto innovador. Dice la norma en este apartado que, en caso de producirse una alarma en el El diseño del sistema ha de dificultar que se cometan errores durante su manipulación y hacer que no sea fácil generar falsas alarmas

RkJQdWJsaXNoZXIy MTI4MzQz