Seguritecnia 466

68 SEGURITECNIA Julio-Agosto 2019 ria Hospitalaria pertenecerá al Cuerpo Nacional de Policía. Al respecto, el de- partamento de Seguridad de la orga- nización sanitaria deberá coordinarse de forma efectiva con ambos cuerpos, tanto para facilitar los traslados como las custodias en consulta o en la Unidad Penitenciaria, así como los accesos y sa- lidas del hospital. La atención a presos en urgencias es seguramente la situación de mayor riesgo en este tipo de circunstancias. Por un lado, la materialización de la ur- gencia se puede producir en horarios y días con menor personal (tanto sa- nitario como de FCSE), como puede ser en el turno de noche o en festivos. Esto dilata los plazos de atención, ha- ciendo que se multiplique el tiempo en el que el reo está presente en la sala de espera general de la urgen- cia debido a la saturación de la misma. Incluso puede que el preso requiera quedarse ingresado en observación 36 horas en un box, donde no se pre- sentan las condiciones mínimas para que los miembros de las FCSE puedan desarrollar su labor mientras esperan a que el paciente se estabilice y pueda finalmente ingresar en la Unidad Peni- tenciaria Hospitalaria. Por otro lado, nos encontramos en no en pocas ocasiones con que el pro- pio interno ha forzado el traslado a ur- gencias, simulando la patología o pro- vocándosela, tras ponerse de acuerdo con familiares o allegados para que le esperen en el acceso del hospital e intentar fugarse durante el acceso o salida del centro (de los traslados de presos a urgencias realizados por la Unidad de Protección y Seguridad de Guardia Civil en la Comunidad de Madrid, solo el 16% de los presos se quedaron ingresados en las unidades penitenciarias hospitalarias, el resto fueron dados de alta, recibiendo trata- miento en el centro penitenciario). Por lo tanto, al igual que con los de- tenidos, es fundamental la realización de un protocolo de atención específico para estos casos. Teniendo en cuenta los datos facilita- dos por la Unidad de Protección y Se- de la sanidad penitenciaria y acuden a hospitales de referencia designa- dos en la provincia o comunidad au- tónoma. La atención hospitalaria a presos que se someten a un tratamiento de du- ración superior a un día o a una inter- vención quirúrgica. La atención urgente a presos por una patología previa, por un accidente o incluso por una agresión dentro del centro penitenciario. Para incrementar la complejidad de la situación hay que hacer referencia a las competencias atribuidas a cada cuerpo de seguridad por la Ley Orgánica de Fuerzas y Cuerpos de Seguridad 2/1986. Esta norma asigna la custodia dentro del centro sanitario al cuerpo responsa- ble de la demarcación correspondiente (Guardia Civil o Cuerpo Nacional de Po- licía), excepto en las consultas progra- madas, en cuyo caso será el cuerpo res- ponsable del traslado. En cuanto al tras- lado, si es interurbano será responsable el cuerpo correspondiente a la demar- cación, pero siempre que se trate de un traslado entre dos municipios será res- ponsabilidad de la Guardia Civil. Por lo tanto, nos encontraremos habi- tualmente con hospitales donde el tras- lado de presos se llevará a cabo por la Guardia Civil y la asistencia a consulta será gestionada por dicho cuerpo, pero la custodia en la Unidad Penitencia- Esta situación es altamente inefi- ciente por varios motivos, entre los que destacaríamos el riesgo que supone la agitación del detenido para el resto de pacientes, así como el detrimento que supone para los servicios activos de las FCSE tener a miembros del cuerpo en- cargados de la custodia. Por todo ello es necesario que el de- partamento de Seguridad sirva de nexo de unión entre las FCSE y la gerencia de la organización sanitaria, y plantee la prioridad de la gestión de este riesgo. Por ello es recomendable tanto la acti- vación de un protocolo que priorice la atención del detenido como, si es po- sible, la habilitación de un espacio dife- renciado para la espera hasta su aten- ción. Atención a presos Este es quizá el riesgo con mayor ne- cesidad de coordinación. Es necesa- ria una constante comunicación entre el departamento de Seguridad y las FCSE debido al número de atencio- nes realizadas, a la probabilidad de in- cidencias e incluso a la implicación de diferentes cuerpos de seguridad tanto en el traslado como en la custodia de los internos. En la atención a presos en centros hospitalarios se presentan tres situacio- nes diferenciadas: La atención a presos especializada que no puede prestarse por parte Seguridad en centros hospitalarios

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