Seguritecnia 471

7 SEGURITECNIA Enero 2020 Editorial “Ser lo que soy, no es nada sin la Seguridad” (Shakespeare) C omienza 2020 con la formación de un nuevo Gobierno tras más de un año y medio de inestabilidad. Un transcurso de tiempo muy negativo para la economía y la sociedad españolas, pues la iniciativa po- lítica ha quedado congelada y, con ella, muchos asuntos aparcados. En el caso que nos ocupa, la Se- guridad Privada ha sido uno de los sectores afectados en cuanto a que una de sus principales necesidades, la aprobación del nuevo Reglamento de Seguridad Privada, ha pasado inadvertida. Dentro de tres meses se cum- plirán cinco años desde la aprobación de la Ley de Seguridad Privada sin que su desarrollo normativo esté adap- tado a las circunstancias actuales. Es decir, un lustro de oportunidades perdidas para culminar la reforma del sector; algo necesario para potenciar la colaboración y corresponsabili- dad entre las empresas y la Administración que propugna la ley. Por ello, desde estas páginas de Seguritecnia exhortamos nuevamente al Ministe- rio del Interior a que reactive la tramitación del borrador del Reglamento, con las modificaciones pertinentes si son necesarias, de manera que el documento normativo se apruebe lo antes posible. El plano normativo no ha sido el único que ha quedado en el aire, sino también otras iniciativas importantes para la seguridad, algunas vincula- das con las infraestructuras críticas. De ahí también la necesidad de reto- mar muchas cuestiones relacionadas con la seguridad privada que qui- zás no ocupan grandes titulares, pero que requieren atención. A modo de ejemplo, además de las mencionadas infraestructuras críticas, hace falta aclarar la situación de la seguridad privada en algunas prisiones, revisar el modelo de contratación por parte del propio ministerio u otras que tie- nen que ver con la ciberseguridad, como la aprobación del Plan Direc- tor de Ciberseguridad del Ministerio del Interior. A estos y otros asuntos se suman las múltiples amenazas a las que España tiene que hacer frente, como la lucha contra el terrorismo, el crimen organizado, la violencia contra las mujeres, los flujos migratorios o la ciberseguridad del Estado. En todos esos asuntos, deseamos que el nuevo gabinete del ministro Fernando Grande-Marlaska consiga avan- zar en pos de una mejora de la seguridad de España. En esa labor está el sector de la Seguridad Privada, cuya inestimable labor queda reconocida cada año por Se- guritecnia durante la ceremonia de entrega de los Trofeos Internacionales de la Seguridad, que en 2019 cumplió su 33ª edición. Las personas, empresas y proyectos reconocidos son muestra de lo provechoso de la correspon- sabilidad de la seguridad pública y la privada. Una suma imprescindible hoy día para afrontar los retos de la se- guridad y para aprovechar las oportunidades. Antes de cerrar estas líneas, queremos hacer un inciso en el trágico accidente de la planta química de Tarragona, en la que han perdido la vida tres personas y varias han resultado heridas. Este lamentable siniestro nos recuerda la importancia de la seguridad industrial, en particular, y de la seguridad física, en general. En un escenario donde las amenazas cibernéticas toman cada vez más protagonismo, no debemos olvidar que los sucesos físicos no desapa- recerán. Por tanto, es fundamental no descuidar esta faceta de la protección de activos y personas. S Un lustro de oportunidades perdidas Dentro de tres meses se cumplirán cinco años desde la aprobación de la Ley de Seguridad Privada, sin que su desarrollo normativo esté adaptado

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