Seguritecnia 476

64 SEGURITECNIA Junio 2020 Opinión T engo un compañero de ca- rrera que, cuando estudiába- mos todo tipo de ecuaciones en la escuela de Teleco, solía decir: “esto no sirve para nada. Únicamente es importante conocer aquello suscep- tible de salir en un telediario, y yo no veo ninguno empezando con este ro- llo”. Pues bien, mira por dónde, aunque hace años era casi impensable, actual- mente ya resulta de lo más normal en- contrarse cada noche con noticias de ciberseguridad en los telediarios. Eso sí, en muchas ocasiones me pone nervioso que lo metan todo en el mismo saco. Para muestra, una no- ticia que veía recientemente: un “ata- que” por WhatsApp en el cual los usuarios reciben un mensaje por el que tienen que mandar 30 euros y sus datos para entrar a formar parte de una red en la cual acabarían reci- biendo 1.000 euros cada uno. El clá- sico timo piramidal de toda la vida. La única diferencia es el medio por el que se recibe el mensaje. Por lo demás, esto tiene poco o nada que ver con la ciberseguridad. Picaresca En puridad, esto de la ingeniería social tiene bastante más que ver con la tra- dicional picaresca mediterránea y ti- mos como el de la ‘estampita’ que con los sistemas informáticos. Lo que ocurre es que hablar de métodos de ingeniería social da un halo de “técnica superior” a quien habla de ello, en oposición a “profesional del timo y el engaño”, que suena peor. Aunque es, al fin y al cabo, de lo que estamos hablando. La única diferencia es que mientras el Lazarillo de Tormes empleaba sus ar- tes para conseguir un trozo extra de queso, el nuevo pícaro del siglo XXI lo hace para conseguir dinero a tra- vés de medios digitales. Por lo demás, es prácticamente lo mismo, si bien es cierto que las nuevas tecnologías faci- litan la labor del timador: hace falta ser más lanzado para engañar en persona que por teléfono; y claramente es aún más sencillo mentir en un email sin po- nerse colorado. Poco a poco los engaños más famo- sos van siendo cada vez menos efica- ces, aunque todavía siguen teniendo éxito. Tomemos, por ejemplo, el timo de la carta nigeriana o timo 419, lla- mado así por el artículo del código pe- nal de Nigeria que viola, y porque ini- Germán Martín Boizas ¿Por qué lo llaman ingeniería social cuando quieren decir timo? “Ni oro ni plata te puedo dar, pero sí muchas enseñanzas para vivir”. ‘La vida del Lazarillo de Tormes’. Anónimo.

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