El asesinato de dos guardias civiles por el narco alerta de la necesidad de más medios

Guardia Civil con crespón negro.
Redacción

La sociedad española está de luto ante el asesinato de dos guardias civiles, Miguel Ángel Gómez González y David Pérez Carracedo, durante una operación contra el narcotráfico en el puerto de Barbate (Cádiz). El suceso ocurrió la noche del 9 de febrero, cuando los agentes fallecidos y otros cuatro compañeros trataban de identificar a bordo de una zódiac a seis lanchas que se encontraban en el puerto. Una de estas embarcaciones de gran potencia utilizada por los narcos para trasladar droga embistió y pasó por encima a la lancha de goma de la Guardia Civil en la que viajaban los agentes fallecidos. Dos de los otros cuatro agentes que intervinieron resultaron heridos, uno de ellos de gravedad.

Por este crimen han resultado detenidas ocho personas, a las que se acusa de dos delitos de asesinato y cuatro delitos de asesinato en grado de tentativa, además de seis delitos de atentado agravado contra la autoridad y un delito de contrabando.

David Pérez Carracedo

David Pérez Carracedo, de 43 años y natural de Barcelona, pertenecía en el momento del fallecimiento a los Grupos de Acción Rápida (GAR). Ingresó en la Academia de Baeza en 2008 e hizo sus prácticas como guardia civil en el puesto de Torrevieja (Alicante). Su primer destino profesional fue el puesto de Arta, en Baleares, para después realizar, en 2010, el curso del GAR en el Centro de Adiestramientos Especiales de Logroño. Un año después ya prestaba servicio en este Grupo de la Guardia Civil. Durante su carrera fue distinguido por la Benemérita en varias ocasiones por su labor. Estaba casado y tenía dos hijos.

Miguel Ángel Gómez

Miguel Ángel Gómez González, de 39 años, era agente del Grupo Especial de Actividades Subacuáticas (GEAS) y natural de San Fernando (Cádiz). Tras su paso por el Ejército, donde obtuvo varias condecoraciones, Gómez ingresó en la Academia de Baeza, en 2019, y realizó sus prácticas en la Sección Fiscal del Puerto de Tarifa. Posteriormente estuvo destinado en el Puesto de Mondejar, en Guadalajara, donde realizó el curso del GEAS. Ya como miembro de este Grupo, en septiembre del año pasado fue destinado a Algeciras. Tenía pareja y una hija.

Más medios frente al narco

Este suceso da cuenta de la agresividad de los traficantes en la bahía de Cádiz, que cuenta con cada vez mayores recursos y más sofisticados. No en vano, la provincia andaluza es una de los principales pasos de droga a nuestro país y donde mayor número de incautaciones se producen de estupefacientes como el hachís o la cocaína, según los datos de la última edición del Anuario Estadístico del Ministerio del Interior.

Entre los medios descubiertos al crimen del narcotráfico en los últimos años están los drones, tanto aéreos y como submarinos, así como tecnologías de contravigilancia que dificultan la actuación de las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad. A ello se suman métodos como el desplazamiento de las drogas en grandes barcos que después distribuyen a embarcaciones más pequeñas o incluso submarinos tripulados.

A esto se suma un incremento de la violencia por parte de las bandas, que cuentan con estructuras cada vez más amplias y capacidad económica suficiente para continuar sus actividades.

Todo ello hace necesario aumentar la dotación tanto de medios técnicos como de recursos humanos policiales dedicados a esta problemática, especialmente –pero no solo– en la provincia de Cádiz.

Aún así, cabe destacar la labor que llevan a cabo las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad en toda España, que aprehendieron en 2022 (datos del último Anuario Estadístico) 57.790 kilogramos de cocaína, 324.711 de hachís, 144.734 de marihuana o 199 de heroína, entre otros estupefacientes.