José Juan Meaza Idirin Responsable de Seguridad PatrimonialBahía Bizkaia Gas

"Con las Directivas CER y NIS 2 tenemos que interiorizar una nueva visión: la respuesta ante contingencias"

José Juan Meaza, director de Seguridad de BBG.

El sector del Gas vive tiempos convulsos, en los que la capacidad de reacción es primordial. Para José Juan Meaza, director de seguridad de BBG, la clave es adaptarse a las situaciones venideras lo más rápido posible. Algo que esta compañía consigue mediante planes como el de seguridad integral o el de continuidad, agilidad en la toma de decisiones y una cultura de seguridad extendida en toda la empresa. Todo, para poder hacer frente a cualquier contingencia.

BBG es la sociedad propietaria de una planta de regasificación de gas natural licuado situada en el Puerto de Bilbao. ¿Cuáles son los procesos más críticos para la compañía desde el punto de vista de la seguridad?

Nuestro objetivo principal es la prestación de un servicio esencial a la sociedad cumpliendo los más altos estándares de seguridad. Por ello, centramos nuestros esfuerzos en proteger los procesos orientados en este sentido. Estos se concretan en la carga y descarga de buques de gas natural licuado (GNL), su almacenamiento en nuestros tanques criogénicos y la regasificación y odorización del gas natural que enviamos a la red de suministro. Asimismo, también forma parte de estos procesos la carga de cisternas de GNL y el bunkering.

Estamos viviendo años complicados debido a la pandemia, desastres naturales, guerras… Con este panorama, ¿cuáles son los riesgos que más les preocupan a día de hoy?

La situación geopolítica ha puesto de relevancia la importancia del gas natural como una pieza clave en el tablero internacional. Este combustible está reconocido a nivel mundial como esencial, pues garantiza en un alto porcentaje, directa o indirectamente, la energía que necesitamos para mantener nuestros niveles de vida y, en algunos casos, la propia subsistencia de las sociedades más afectadas por las consecuencias de los conflictos o situaciones de pobreza. Estamos hablando de una energía de transición (calificada como «verde» por la UE), que se ha colocado en el eje de las políticas macroeconómicas a nivel mundial.

A escala europea, España está muy bien dotada de plantas regasificadoras. Dispone de seis en servicio del total de las 20 existentes en la UE, que concentran el 33,6 por ciento de la capacidad regasificadora de toda la Unión, así como el 44 por ciento del almacenamiento de GNL del continente.
Por otro lado, los orígenes del GNL son muy diversos. En España, durante el año 2022 se descargó GNL de 19 países diferentes. Esta diversificación y el número de plantas existentes son razones más que suficientes para pensar que no es probable tener problemas de suministro.

El riesgo en el área de la protección es que la relevancia que ha adquirido el GNL y la repercusión de su influencia en el tablero energético internacional lo ha puesto en el punto de mira de grupos terroristas. Por ello, debemos mantenernos en guardia permanentemente aplicando las medidas de protección establecidas en nuestros planes de seguridad para el nivel de alerta antiterrorista establecido por el Gobierno, garantizando a su vez la prestación del servicio de puertas hacia dentro, ya que es nuestro ámbito de actuación.

¿Cuáles son los aspectos más destacados de su política de seguridad?

Uno de los objetivos estratégicos de BBG es el cumplimiento de su Política de Seguridad Integral, que busca garantizar la integridad y seguridad de las personas, las instalaciones, la prestación de los servicios esenciales y la seguridad de la información. Lo que más destacaría de ella es que es integral y muy ambiciosa. No nos hemos conformado con establecer una política de seguridad al uso en la que se incluye la seguridad física y la lógica, sino que hemos ido más allá. Además de estas dos áreas, nuestra Política de Seguridad Integral engloba la seguridad de la información, la seguridad industrial, la prevención de riesgos laborales, nuestro sistema de compliance y el Reglamento General de Protección de Datos (RGPD).

En todos estos ámbitos nos centramos en el cumplimiento normativo y nos apoyamos en nuestros sistemas de gestión certificados (ISO 19600, 19601, 27001, 45001, etc., con el refuerzo de la ISO 9001, la 14001, la 50001…).

También disponemos de un Plan de Continuidad del Negocio en el que identificamos nuestros procesos críticos y sus diferentes ámbitos, los posibles escenarios de una contingencia, las pautas para organizarnos internamente y gestionarla adecuadamente, así como las formas para volver a la situación inicial lo más rápida y eficazmente posible.

“No nos conformamos con una política de seguridad al uso que incluya seguridad física y lógica, sino que hemos ido más allá”

¿Cuál es el modelo que sigue la compañía para conseguir que la seguridad sea realmente integral, abordando todos los aspectos en la materia?

BBG realiza una revisión de su estrategia periódicamente en la que define o valida los objetivos estratégicos. Dentro de los equipos que trabajan para cumplirlos, existe uno cuyo objetivo es garantizar que la seguridad se implante de forma integral. Para ello impulsa y ampara el cumplimiento de los marcos normativos establecidos ayudándose de las certificaciones ISO relacionadas y de las auditorías, tanto internas como externas, que se realizan en los diferentes ámbitos de la seguridad.

Llevamos a cabo un seguimiento continuo del cumplimiento del objetivo y de sus acciones asociadas y se reporta periódicamente al Consejo de Administración y al equipo directivo. Asimismo, los resultados de este objetivo son conocidos por todo el personal de la compañía.

BBG

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