Noa González Subdelegada de Seguridad Renfe Operadora

"La digitalización del sector es ya una obligación, y quien se resista no tendrá hueco"

Noa González

¿Cuáles son los principales cometidos que realiza en su ámbito de actuación en Renfe Operadora?

Dentro de la Dirección de Seguridad, Autoprotección y Prevención de Riesgos se encuadra la Gerencia de Área de Seguridad Corporativa, y bajo su coordinación se articulan cinco delegaciones territoriales. En concreto, ejerzo la responsabilidad de la Subdelegación de Seguridad de Galicia, dentro de la Delegación de Seguridad Norte.

Esto significa que soy la responsable de los dispositivos de seguridad corporativa, tanto ordinarios como extraordinarios, en mi ámbito geográfico. Gestiono, en este sentido, la seguridad en los trenes, talleres y estaciones de Renfe. Un ámbito en el que cabe destacar la importancia de la colaboración con las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado y con los organismos públicos de emergencias.

¿Está aumentado la presencia de mujeres en el Área de Seguridad de Renfe Operadora?

Es cierto que la presencia de mujeres en el ámbito de la seguridad suele ser limitada; situación que se agudiza si atendemos a puestos directivos. Sin embargo, creo que dentro de Renfe se empieza a equilibrar la situación. En los últimos tres años se han incorporado a la Gerencia del Área de Seguridad Corporativa 20 profesionales femeninas con diferentes responsabilidades. De hecho, cuatro de nosotras somos subdelegadas de Seguridad.

Desde su punto de vista, ¿cómo cree que va a evolucionar la seguridad en los próximos años?

Tenemos que adaptarnos a una realidad en constante transformación. No podemos enrocarnos en fórmulas estáticas, sino trabajar nuestra capacidad para detectar nuevas tendencias y patrones. De esta forma, nos situaremos en la predicción y no en la reacción.

Creo que debemos procedimentar conforme a la probabilidad y explorar vías que nos permitan tomar decisiones ágiles en escenarios menos previsibles. Por lo tanto, considero que haremos foco en el control de identidad y en el análisis de inteligencia, lo que nos llevará a una gestión basada en la explotación de datos y a una actuación articulada por equipos público-privados, dentro de lo corporativo.

Presumo que la seguridad va a ganar mayor peso en los próximos años, y eso nos exigirá agudizar el ingenio para crear un engranaje eficiente entre lo analógico y lo digital, entre el trabajo de calle y el de análisis.

La digitalización del sector es ya una obligación, y quien se resista no tendrá hueco.