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246 SEGURITECNIA Febrero 2016 Entrevista El sector está estigmatizado por imá- genes que los medios han transmitido de las conductas de unos pocos mise- rables que, con sus malas praxis, des- prestigian una labor estoica y abnegada de decenas de miles de profesionales con millones de horas al año de servi- cio, con pérdidas de sus propias vidas, de su integridad física, que conllevan acciones nobles y heroicas dignas de la misma repercusión. Clientes, empresas y asociaciones tie- nen una gran culpa de esta imagen puesto que no transmiten estas accio- nes a los medios para que tengan la de- bida repercusión. – Como remate, ¿por qué deben acer- carse los interesados a Ourense? Celebramos este congreso en Ourense para descentralizar y porque hemos conseguido una implicación y colabo- ración de las administraciones implica- das. Pero no sólo eso, Ourense ofrece unas excelentes posibilidades para con- gresistas y acompañantes como son la cultura, la gastronomía o el termalismo, además de excelentes posibilidades en comunicación. Asimismo, la ciudad está comunicada por autopista y autovía con su entorno, con los aeropuertos de Vigo y Santiago a 100 kilómetros, a cua- tro horas de Madrid y a menos de dos horas de vuelo de Barcelona, con tarifas muy económicas. S de un curso. No puede servir el mero co- municado estandarizado… Tiene que existir una aplicación que tan pronto como un alumno o docente se comuni- que con la Administración produzca un correo o un mensaje para prevenir y de- nunciar fraudes, que se siguen produ- ciendo y detectando periódicamente. Es necesario, como se ha hecho por parte de la fundación tripartita, res- tringir la formación a presencial y on- line con los requisitos técnicos, especi- ficando de forma concreta qué temas y contenidos pueden impartirse de forma no presencial. Asimismo, es importante definir si puede o no considerarse pre- sencial las ponencias y la asistencia por videoconferencia interactiva. – ¿Una mejor formación repercutiría en una mayor valoración social de la seguridad privada? Sin ningún género de duda. La forma- ción de calidad debe ser entendida como sinónimo de cualificación y ca- pacitación y ello lleva a un desempeño profesional y reconocimiento. Hoy tenemos grandes profesionales, pero con 180 horas en algunos casos, y en otros con 90 presenciales y 90 a dis- tancia, no pueden abordarse con efica- cia ni los contenidos mínimos. Que exis- tan otros 14 cursos complementarios debe ser fruto de una profunda revisión en contenido y duración mínima. dad, aunque por falta de financiación no hemos podido llegar a cerrar nin- gún acuerdo. – Habla de “cultura de seguridad”, pero ¿a qué se refiere exactamente? Existe el dicho que afirma que “en Es- paña todo el mundo sabe de fútbol, ex- cepto el seleccionador nacional”, en se- guridad sucede lo mismo. Los ámbitos de la seguridad abordan campos muy diversos: defensa, inteligen- cia, continuidad de negocios, seguridad corporativa, industrial, medioambiental, laboral, vial, lógica, alimentaria, etc. Las empresas y los grandes directivos de algunas multinacionales no saben la diferencia entre un técnico de preven- ción, un vigilante, un director y un jefe de Seguridad. Las grandes escuelas de negocio y los programas de mayor re- conocimiento de MBA no contemplan la seguridad como parte del negocio, pese a que su imagen, su continuidad y su responsabilidad con la sociedad de- penden, en gran medida, del concepto de seguridad integral y de su gestión. Cuando nos referimos a cultura de se- guridad se trata de concienciar no a un sector que ya sabe, conoce y aplica esta cultura, sino de extender la idea a la so- ciedad y a los medios de comunicación. – ¿Existe la necesidad de regular de otro modo la formación en el sector? Es imprescindible matizar, perfeccionar, mejorar disfunciones, programas des- estructurados o que repiten contenidos transversales… Es decir, la respuesta es que sí. Es necesario regular el funciona- miento, la gestión y el control como su- cede en otros ámbitos regulados tam- bién por interior. Tenemos el ejemplo de las autoescuelas y de otros cursos en los que las distintas administraciones, a través de aplicaciones informáticas, su- pervisan todos los elementos de la for- mación como docentes, horarios, alum- nos y programación. Es necesario matizar qué se entiende por presencial y distancia. No puede ser admitido aquello de que te doy un te- mario, te lo llevas y me mandas unos exámenes y justificamos el 50 por ciento

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