Seguritecnia 483

/ Febrero 2021 64 Seguridad Portuaria tes. Es por ello que debemos ampliar el foco de nuevas perspectivas dentro de la inspección. Para finalizar, vale la pena poner énfa- sis en la importancia de la comunicación entre puertos y proveedores de tecnolo- gía. Hoy en día, éstos tienen la posibilidad de seguir la evolución tecnológica de la mano de los propios fabricantes. Como en cualquier mercado, la transparencia y transmisión de la información en forma de requisitos entre el cliente-usuario y el proveedor de tecnología permite a este último ofrecer una respuesta acorde con las necesidades de cada usuario. Es un hecho irrefutable que a un comprador informado le será más fácil exigir a sus proveedores soluciones actuales que fa- ciliten su operativa, haciendo ésta más ágil, segura y moderna, pero, sobre todo, más adaptada a su propio contexto. Ahondado en los obstáculos que frenan la agilidad en los procesos de inspección, se entiende que es impres- cindible ayudar al operador a tomar de- cisiones acertadas rápidamente, y éste es el siguiente paso hacia un escaneado más cuantioso. Se deben considerar dos vectores sobre los que debemos actuar: formación del operador y ayudas a la detección. Estas pueden ser las líneas sobre las que seguir desarrollando las actuales soluciones, sumando una ges- tión remota que permita, a su vez, dos mejoras nada desdeñables: por un lado, la optimización del número de operarios, y por otro, dar un tratamiento objetivo a la información obtenida. En el camino de la evolución tecnoló- gica, cometeríamos un error si fuéramos conformistas limitándonos a mejorar “simplemente” las soluciones existen- servicios, y en ningún caso despreciar cada minuto de retraso, pues supone, además de un coste monetario, una pér- dida de imagen de marca tanto del puerto como de sus terminales. Tiempo de escaneo En este sentido surge la necesidad de minimizar los tiempos de escaneado y ayudar al objetivo ideal de controlar el cien por cien de la carga sin perder ope- ratividad. En respuesta a esta carencia, los fabricantes diseñan una solución propia y exclusiva para la inspección de vehículos como es el escaneado rápido (el cual nos permite escanear hasta 300 vehículos por hora), en donde el conduc- tor deposita el vehículo en una zona de espera para que un robot mueva y dis- tribuya el vehículo para su posterior es- caneado y valoración positiva o negativa de la carga. Está en nuestra mano asimilar los sis- temas de inspección como inversiones con retorno real y no como un simple gasto para satisfacer las necesidades de otros organismos públicos. Son varios los beneficios que nos ofrecen los escá- neres de vehículos: seguridad, moderni- dad, prestigio y un incremento del tráfico de pasajeros. Es necesario minimizar los tiempos de escaneado de vehículos y conseguir controlar el cien por cien de la carga sin perder operatividad