Joaquín Lorao
Joaquín Lorao Technical & Marketing Director Pefipresa

Protección contra incendios: nuevos horizontes hacia la consolidación normativa y profesionalización del sector

RIPCI. Instalación contra incendios.

A diferencia de otros países, la reglamentación en España en materia de seguridad contra incendios siempre había sido una asignatura pendiente. Como se puede apreciar en el cronograma inferior, no fue hasta 2006, con la publicación del actual Código Técnico de la Edificación (CTE), cuando España dispuso de un marco reglamentario asentado. Ahí empezaron a convivir simultáneamente el antiguo RIPCI (Reglamento de Instalaciones de Protección Contra Incendios), el RSCIEI (Reglamento de Seguridad Contra Incendios en los Establecimientos Industriales) y el CTE.

Pero, por aquel entonces, se hacía muy evidente la demandada actualización del antiguo RIPCI por estar muy al margen de la evolución de la técnica y del sector.

Tras varios años de gestiones y trámites, unido al empuje del sector y el trabajo de la Administración, por fin en el año 2017 el actual RIPCI (Real Decreto 513/2017) ve la luz irrumpiendo y generando una transformación, a la vez que abriendo paso a un nuevo horizonte hacia la tan esperada y necesaria profesionalización del sector.

Este nuevo reglamento supuso una transición más en línea con el marco europeo. Afectó de manera directa a los fabricantes y a las numerosas compañías instaladoras y/o mantenedoras. Para estos últimos, tanto en su actividad (instalaciones y mantenimientos), como en la empresa en sí (estructura), conllevó llevar a cabo una gran adaptación para cumplir con unas nuevas exigencias que marcaron un nuevo horizonte.

Por otra parte, cobra especial relevancia para los organismos las nuevas inspecciones por tercera parte de las instalaciones no reguladas por reglamentación específica. Se cubrieron así áreas desamparadas hasta el momento en instalaciones, tales como las no industriales o las anteriores al RSCIEI (Real Decreto 2267/2004).

A día de hoy, tras más de dos años desde la entrada en vigor del actual RIPCI (Real Decreto 513/2017), la trasformación sufrida por el sector es ya cosa del pasado. Se ha implementado una mejora notable y, en consecuencia, una importante evolución hacia la profesionalización. Y esto conduce a un aumento en la seguridad en beneficio de todos.

Profesionalización

El futuro de las empresas está muy ligado a la citada profesionalización del sector. Algo fundamental para las mismas y para todos los profesionales que de alguna manera tienen relación directa e indirecta para que, en un futuro cercano, estos puedan ejercer en un sector totalmente regulado.

Al margen de los cambios ya mencionados, como asignatura pendiente quedaría, entre otros, la protección pasiva, que quedó finalmente fuera del actual RIPCI. En especial la figura del instalador y mantenedor. Y, por otra parte, la formación de los profesionales, tanto en protección activa como pasiva.

En definitiva, aunque se ha dado un paso de gigante, aún queda mucho que mejorar en el sector de la protección contra incendios.

RIPCI. Normativa PCI.

Carencia normativa

Al contrario que ocurre con la protección activa, en la protección pasiva existe una gran carencia normativa.

Además de no estar regulada la figura del instalador y del mantenedor. Por esa razón, es importante destacar la labor de Cepreven. Con la incorporación de la nueva calificación voluntaria de empresa de instalación de productos de protección pasiva, se da un gran paso hacia adelante en busca del aumento de la seguridad y de la confianza de este tipo de instalaciones.

Por otra parte, es muy relevante el trabajo que se realiza desde Tecnifuego, tanto en Europa (a través de la Asociación de la Protección Pasiva contra incendios, EAPFP), como en España (mediante los comités sectoriales de la propia asociación), así como en los subcomités técnicos del CTN 23.

En lo que se refiere a la formación de los profesionales y a su directa vinculación con la mejora de la profesionalización del sector, cabe destacar una novedad importantísima: el Ministerio de Educación y Formación Profesional está desarrollando las competencias que profesionales de nivel 2 de la PCI deben tener para ejercer en su ámbito profesional mediante la elaboración de una nueva cualificación profesional en sistemas de protección activa contra incendios. Un proyecto realizado a través del Instituto Nacional de las Cualificaciones (Incual) y con la colaboración de instituciones como Tecnifuego y Cepreven y de determinadas empresas del sector –entre otras Pefipresa–.

Esta cualificación formará parte del Catálogo Nacional de Cualificaciones Profesionales, correspondiente a la familia profesional de instalación y mantenimiento.

En cuanto al avance de esta nueva cualificación profesional, que comenzó el pasado año, ya está próxima a la fase de contraste externo (organismos y compañías del sector ratifican su contenido). En base a ello, ya se han desarrollado las unidades de competencia tanto de instalación como de mantenimiento de los diferentes sistemas de protección activa contra incendios.

Esta cualificación servirá de base para el desarrollo de títulos de formación profesional, certificados de profesionalidad y procedimientos de evaluación y acreditación de las competencias profesionales adquiridas a través de la experiencia laboral, lo que facilitará el acceso de personal formado al sector.

Aquí resaltaría, en este sentido, la buena armonía y colaboración entre la Administración y todas las empresas participes. Un elemento clave del éxito de este proyecto tan significativo para la profesionalización.

RIPCI. Instalación contra incendios.

Revisión del RSCIEI

Al hilo de las novedades en el sector, aunque más del lado de la reglamentación, cabe destacar que ya está en la fase última la revisión del RSCIEI. Gracias a ella, a su término, podremos contar con una reglamentación en el ámbito nacional (RIPCI, CTE y RSCIEI) actualizada y en sintonía.

Además, a partir de ese momento, sería positivo para el sector actualizar la relación de normas que figuran en el apéndice del anexo I del actual RIPCI. Concretamente, mediante las continuas publicaciones en el Boletín Oficial del Estado de las resoluciones correspondientes de la Dirección General de Industria y de la Pequeña y Mediana Empresa.

Esto posibilitará tener constancia de la fecha a partir de la cual dejarán de tener efectos reglamentarios las ediciones de normas que ya han sido actualizadas por el organismo de normalización español. Así disminuirá, en la medida de lo posible, la convivencia entre versiones de la misma norma. Al no figurar la última versión en dicho anexo I del RIPCI, se generan conflictos en el sector, como ocurre por ejemplo con la UNE-EN 12845, UNE 23500, UNE 23033-1 o la UNE 23585 (esta última recién actualizada en la última modificación del CTE).

En cualquier caso, y en base al gran trabajo y esfuerzo que está realizando la Administración, no faltará mucho para esta primera actualización del apéndice del anexo I del actual RIPCI.

Mantenimiento

Por otro lado, y siguiendo con la reglamentación, además de la pasiva, otro talón de Aquiles del RIPCI es el mantenimiento en base al programa del anexo II en sus diferentes tablas. En este sentido, aunque aún queda mucho camino para estar al nivel de la NFPA 25 (inspección, comprobación y mantenimiento de sistemas hidráulicos de PCI), es importante mencionar que ya se está trabajando en la actualización de la familia de normas UNE 23580, actas para la revisión de las instalaciones y equipos de PCI.

Para ellas se están utilizando como base las Actas de mantenimiento de Tecnifuego, las cuales, hasta el momento, han tenido una gran acogida dentro del sector. Sin duda, un gran avance para el mantenimiento de todas las instalaciones de protección activa contra incendios.

Durante estos últimos años, el sector está evolucionando de manera muy positiva. Atrás queda aquella época de obsolescencia normativa. Y aunque todavía queda mucho por hacer, en base a la gran actividad de las diferentes asociaciones con el apoyo de las empresas, así como de la Administración, se augura un futuro muy prometedor en línea con la mayoría de los profesionales que lo componen. Profesionales que siempre están concienciados con la protección contra incendios.