Dinero en efectivo El Observatorio Sectorial, en contra de la propuesta del PSOE de eliminar el efectivo

Pago con un billete en un comercio
Redacción

El Observatorio Sectorial de la Seguridad Privada ha mostrado su desacuerdo con la propuesta del PSOE de eliminar el dinero en efectivo progresivamente. El Grupo Socialista presentó en abril la iniciativa en el Congreso y hoy se debate en la Comisión de Hacienda de la Cámara Baja. Por ello, la agrupación de seguridad privada ha solicitado al resto de partidos políticos que rechacen la idea «dados los múltiples perjuicios que esta medida puede causar en la sociedad».

«Esta iniciativa va en sentido contrario a las ya adoptadas por diversos países de nuestro entorno», afirma el Observatorio en un comunicado. Además, añade, «tampoco tiene sentido que se ubique dentro de un marco para la mejora del sistema tributario, máxime cuando la experiencia de los países de nuestro entorno demuestra que no existe una vinculación directa entre los porcentajes de utilización del efectivo y los niveles de economía sumergida».

Impacto de la eliminación del dinero en efectivo

El Observatorio plantea varios argumentos en contra de eliminar del dinero en efectivo entre los medios de pago a disposición de la sociedad. Uno de ellos es que su retirada de circulación «impacta de forma muy directa en los colectivos más desfavorecidos de la sociedad, cuyo nivel de bancarización es muy inferior, y que dependerían para los actos de su economía doméstica de la decisión de las entidades bancarias o de los grandes proveedores de Internet».

Por otro lado, la agrupación compuesta por la patronal y varios sindicatos alega que esta medida afectaría «muy directamente a los más de nueve millones de pensionistas, de los que más de dos millones no viven acompañados, y que desde siempre realizan sus pagos y operaciones comerciales de forma muy mayoritaria mediante dinero físico».

Asimismo, «dificulta o impide que la población más joven pueda realizar cualquier tipo de compra habitual del día a día, al no tener acceso a las tarjetas bancarias».

Por otro lado, el Observatorio considera que la retirada del efectivo, incide en la competitividad de los pequeños comercios porque tendrían que invertir en adquirir plataformas de pago. «El comercio de proximidad podría perder un importante volumen de clientes en favor de las grandes superficies comerciales, en especial aquellos de reparto, que se verían obligados a implantar el pago on-line como único medio de pago permitido», añade.

La medida planteada por el Grupo Socialista condiciona además la libertad de quienes no quieren asumir los costes adicionales que supone tener una tarjeta bancaria, añade el Observatorio.

Por último, el Observatorio advierte de que la retirada de efectivo «significa optar por la eliminación del único medio de pago público y acelerar la completa privatización de este ámbito de actividad».