Los mejores consejos para seguir con tus oposiciones durante el verano

Redacción

A la hora de estudiar unas oposiciones en verano es importante focalizarse en el trabajo diario y no distraerse con el entorno veraniego. Es fácil no encontrar la fuerza necesaria en una época que la mayoría de personas utilizan como descanso, a lo que se suma el calor, el ruido, las horas de sol. Diríase que todas las características de la estación estival alejan de la concentración y el rendimiento imprescindibles. Para sortear los elementos adversos, aquí tienes los mejores tips o consejos para prepararse unas oposiciones en verano.

1. Reestructuración de horarios

Durante los meses de junio, julio, agosto y septiembre, los días son más largos y los picos de calor varían. Por ello, es preferible madrugar y estudiar desde bien temprano para aprovechar las horas de menos calor.

De igual modo, madrugar puede ayudarte a conseguir tiempo libre al final de la jornada para darte un chapuzón o quedar con amigos, ya que mantener la mente fresca y despejada es esencial para combatir el cansancio.

2. Sitios de estudio

Para evitar el calor, la mejor opción es acudir a lugares bien acondicionados. En el caso de contar con aire acondicionado en la habitación de casa, la temperatura ideal ronda entre los 24ºC y los 26ºC.

En caso de no tener ventilación, estudiar en bibliotecas y aulas de estudio es la mejor opción, ya que cuentan con buenos sistemas de aire acondicionado para pasar mejor los ratos de estudio durante las olas de calor. Además, el ambiente estudiantil ayuda a no perder la concentración.

3. Descanso

Tomarse un rato para descansar es primordial para mantener la mente activa. Además de las siete u ocho horas diarias de sueño, es recomendable tomar ciertos descansos a lo largo del día para no saturarnos.

Estos descansos son recomendables a lo largo del año, pero en verano el cansancio y la fatiga aparecen con más frecuencia.

4. Cuidar la alimentación

Mantener una buena dieta nos ayudará a mantenernos hidratados y activos. Es importante acudir a comidas ligeras y frescas para combatir el calor y el sueño, de igual forma es fundamental tomar al menos un par de litros de agua diarios.

Además, alimentos ricos en proteínas como el salmón, el huevo, los lácteos o frutos secos como nueces o almendras ayudan a mejorar el rendimiento cognitivo.

5. Desconexión digital

Para no sentir frustración a la hora de estudiar debido a que nuestro alrededor está de vacaciones y disfrutando del verano, mientras nosotros nos pasamos el día entre paredes, es importante dejar las redes sociales a un lado. En otras palabras, «ojos que no ven, corazón que no siente».

Esto no quiere decir, que no sepas nada de tus amigos durante todo el verano, sino que hay que priorizar el estudio a la curiosidad por saber que está haciendo tu entorno.

6. Control de la ansiedad

Pensar que nos estamos «perdiendo el verano» puede ocasionar ansiedad y agobio que hay que mantener a raya. También es importante no exigirse más de lo que podemos dar y en el caso de comenzar a tener pensamientos angustiosos, es preferible cerrar los libros y tomar el aire a intentar seguir ineficazmente con el estudio.

Además, es crucial mantener una mentalidad positiva y rodearte de personas que valoren tu trabajo.